sábado, 5 de abril de 2014

Taller infantil en ParesoNones

Paresonones es una encantadora juguetería junto a los Juzgados de Sevilla, en el Prado, que tiene un poco de todo (juegos de mesa, juegos de construcción, muñecos, casas de muñecas, libros, material escolar, etc.) y donde todo tiene un fin didáctico. Creo que es una de las máximas del establecimiento.

Además, todos los meses tienen un programa de actividades orientadas a los niños en el que participan especialistas de distintas disciplinas, como la pintura, la música, los idiomas y otras materias para impartir talleres entretenidos y educativos. 

Hace unos meses, vi que en su programa promocionaban la colección Tú decides la aventura de Editorial Hidra y les comenté que yo era autor de dos de los títulos. De ahí surgió la idea y la oportunidad de desarrollar un taller literario infantil, que es lo que hicimos ayer con un grupo de pequeños lectores. 


El objetivo era explicarles en qué consistía un libro-juego, como los de Tú decides la aventura. Para llegar a ese punto, quise introducirles en la literatura en general, hablándoles de cuando no había libros y las historias se contaban oralmente, se pintaban en las paredes, se grababan en las piedras, se inscribían con un punzón en tablas de arcilla, se tallaban como jeroglíficos en paredes y monumentos, se escribían en rollos de papiro o las cantaban los trovadores medievales. También intentamos definir entre todos lo que es un libro y para qué sirve. Y no podíamos dejar de recordar cómo se cuentan hoy en día las historias: en la tele, en el cine, en la radio, en los videojuegos y en internet.  

Lo más interesante fue ver las caras que ponían cuando les enseñé las partes principales de un libro (principio, desarrollo y fin) y cómo cobran un sentido diferente en la hiperficción explorativa (les encantó apuntar en sus papeles estas palabrejas tan raras), es decir, en los librojuegos.


Al final, leímos como ejemplo un pequeño relato que había preparado y, a modo de juego, construimos entre todos una pequeña historia usando la misma técnica que en los librojuegos. Fue muy divertido y todos lo pasamos muy bien. Tanto es así que mas de uno quiso leer uno de mis libros y no les importaría repetir la experiencia.

Desde aquí, agradezco a las chicas de ParesoNones que me ofrecieran este espacio para recrearme con los niños y todo el entusiasmo con el que se toman su proyecto, tan personal y tan grande.