Tanto tiempo esperándolo y ya quedó como recuerdo del pasado. Pero es cierto que disfrutamos de cada momento.
Aunque el viernes hubo algunas actividades fuera de programa que ya despertaron el interés de muchos, comenzamos el sábado con la inauguración oficial a cargo de Mª Carmen Gómez, la directora de la Biblioteca Pública de Dos Hermanas, y sonriendo a costa del singular discurso de Jerónimo Tristante, que llevaba como título el lema del V Encuentro, La realidad está en crisis.
Después debatimos, especialmente con los escritores (Olalla García, Teo Palacios, y Pepe Carrasco, entre otros; Santiago García-Clairac lo hizo desde el público) y los editores, Teresa Petit de Montena y David González de Berenice, en las mesas redondas Artes y oficios en torno al libro fantástico y ¡El papel ha muerto, vivan los bits!
Tuvimos ocasión de dialogar durante el almuerzo en el Palacio de Alpériz y de reanudar las conversaciones que dejamos interrumpidas un año o dos antes con amigos como Javier Negrete, Alfonso Merelo, Juan Ramón Biedma y Santiago García-Clairac.
También asistimos a la presentación de libros, como 10 billetes para el fin del mundo, y El humo en la botella de J. R. Biedma o la colección Tú decides la aventura, que promocionamos Pepe Carrasco y yo.
El domingo intentamos dilucidar otro cariz de las crisis literarias con la conferencia impartida, de forma muy personal y basada en su propia experiencia, por el escritor Joaquín Londáiz.
Mi papel de presentador me permitió, por proximidad, analizar cada una de las ideas que iba describiendo el conferenciante mientras hablaba y constituir el Decálogo Personal de Joaquín Londáiz para saber ¿Cómo escribir sin entrar en crisis? Dicho decálogo constaría de los siguientes mandamientos:
1) Leer mucho.
2) Tener en mente siempre a los lectores.
3) Mantener activos varios hilos argumentales para desarrollarlos.
4) Elaborar personajes con identidad propia.
5) Preparar un esquema argumental que permita desarrollar tramas paralelas y en cascada.
6) Descubrir con los personajes su propia aventura y su destino.
7) Tener disciplina y método.
8) Participar en la promoción de la obra para motivarse con el contacto con los lectores.
9) Mantener contacto con los lectores y responder a sus mensajes en internet, en las redes sociales y por correo electrónico.
10) Aportar ilusión.
Con la última actividad, la mesa redonda titulada La Atlántida: Mundos en crisis y compuesta por Javier Negrete, Juan Manuel Cortés, Joaquín Londáiz, Alfonso Merelo (como moderador) y yo mismo, conseguimos despertar de nuevo la discusión, ya que mezclaba la literatura con la historia, la ficción con la realidad. Cada uno de los ponentes defendió concienzudamente su hipótesis y el profesor Cortés aportó los matices más solemnes y eruditos con magistral acierto.
"¿Sabían los griegos de lo que hablaban?", se preguntó, aludiendo a las obras clásicas en las que nos intentaban contar la realidad que les rodeaba. Y la respuesta fue: "No completamente". Aunque intentaban ser precisos, no podían indagar sobre el terreno. Para empezar, ni siquiera tenían mapas y su visión de la geografía se basaba en mapas de itinerarios y caminos, sin forma concreta. Conforme se descubría el mundo, se iluminaba con el foco del conocimiento y se perdía la penumbra de la fantasía. El mito de la Atlántida tal vez se originó en el mundo maravilloso del que hablaban los comerciantes, que dejó de serlo cuando más tarde fue explorado por los romanos. El profesor Cortés dictó que "la literatura fantástica es también un modo de conocimiento que utiliza mundos ficticios para comprender mejor el mundo real".
Por último, los miembros del comité organizador clausuramos el V Encuentro, haciendo un resumen de su desarrollo, agradeciendo la participación y la colaboración de toda la concurrencia, y poniendo deberes para la siguiente edición.
Durante el fin de semana, el ambiente fue el adecuado y los moderadores hicieron muy bien su trabajo, manteniendo el equilibrio entre los ponentes y el público. La impresión general parece haber sido muy positiva, aunque ahora habrá que analizar todo, en particular aquellos aspectos que sabemos que se pueden mejorar y lo que se pueda extraer de los cuestionarios que entregaron los asistentes, para comprobar si el balance ha sido tan positivo como pensamos.
Otras referencias:
Dos Hermanas y la excelencia, de Alfonso Merelo
Fotos de Jerónimo Ferrández
Cobertura fotográfica del V Encuentro, en el blog de la Biblioteca Pública de Dos Hermanas
Galería fotográfica del V Encuentro, de Estudio Mira
Nota: Algunas de las fotos que se han utilizado forman parte de la galería de Estudio Mira y todos los derechos sobre las mismas les pertenecen.
2 comentarios:
Qué maravilla. Cómo lo he disfrutado... tanto que me parece que sigo viviendo en el fin de semana. :D
Muchas gracias por el esfuerzo y la ilusión que has puesto en todo esto, José Ángel. Su éxito es también el tuyo.
Es un éxito para todos. Si no lo viéramos así, solidariamente, no tendría sentido. Si no lo viéramos así, no podría reconfortarnos tanto que hubiera invitados de otros años que acudieran a inscribirse, como Santiago García-Clairac, o que la gente conozca ya estos Encuentros y acepte encantada la invitación, o que gente que compartió su afición y su vocación resulte galardonada con un premio literario... El círculo se estrecha porque todos ponemos nuestra parte.
Publicar un comentario