domingo, 6 de marzo de 2011

Biblioforum: Demanda y creación; ¿qué le pides a un libro?

De vez en cuando, los escritores decidimos hacer cosas juntos. En Sevilla, no es la primera vez que ocurre. Pero me parece que el entusiamo puesto en esta ocasión ha sido tan importante como para conseguir darle cierta continuidad.

Hace unos meses, los autores Pepe Carrasco (Capitán Nadie), Fran de Paula Pérez (El guerrero elfo) y Juan Antonio Caro Cals (Señores de Godos) tuvieron una idea. Inmediatamente, hicieron todo lo posible para hacerla realidad. Consistía en reunirse una vez al mes, componer una mesa redonda y hablar con todos aquellos que quisieran asistir al encuentro, al que denominaron Biblioforum.

El sábado 5 de marzo se celebró el segundo Biblioforum en el salón de actos del Centro Cívico "Casa de las Sirenas", en la Alameda de Hércules. La audiencia sigue creciendo. Probablemente crecerá más si aumentamos la difusión. Y sinceramente creo que, además del placer que supone reunirte con unos cuantos amigos, lo que se habló allí fue muy interesante.


Con el título Demanda y creación; ¿que le pides a un libro?, los tres escritores antes mencionados y yo estuvimos intercambiando opiniones sobre el proceso de escribir un libro. A veces nos llevamos la razón, pero la mayor parte del tiempo discrepamos, por lo que el abanico de cuestiones planteadas se abrió muchísimo y dio pie a que el público interviniera en cuanto se lo propusimos.

A continuación, recojo algunas de las reflexiones que se hicieron, tal como fueron absorbidas por mí. Es decir, que no son necesariamente citas literales.

Francisco de Paula Pérez y Pepe Carrasco recalcaron la diferencia entre ser un escritor de mapa o de brújula a la hora de ponerse manos a la obra.

Francisco también señaló que lo que debe brillar en una historia es lo ordinario y, de este modo, hacerse extraordinario. Asimismo, afirmó que a menudo nos descubrimos a medida que nos expresamos; por tanto, al escribir damos pasos en nuestro proceso de maduración como personas, como pasa al llevar a cabo otras actividades.

Pepe expuso que, como seres humanos, los escritores necesitamos al lector. Por eso la historia debe ser transferible y no estar plagada de intimidades que solo el escritor podría comprender. El ser humano necesita a la sociedad y el arte necesita la comunicación a los demás. Debe existir la obligación de proyectar la obra a los demás y, para ello, hay que adaptarla, hacer cambios y cesiones, hasta conseguir el producto final. Además, como apuntaron desde el público, hay que perseguir la adecuación de la forma al contenido y preguntarse cómo debe ser contada una historia concreta. Finalmente, Pepe concluyó que quizá lo que diferencia a un escritor de alguien que podría escribir pero no lo hace es la perseverancia.


Por mi cabeza pasaron muchos pensamientos y, de hecho, no tuve tiempo de manifestar algunos de ellos. Por ejemplo, la improvisación puede ser un factor importante en la elaboración del libro (es cuando se confía en lo que dicten la propia historia y en los personajes), pero ciertamente siempre existe en la mente del escritor una sustancia etérea que delimita la estructura general de la obra. Se dijo que podías empezar una novela y no conseguir concluirla, porque no lograbas encontrar esa estructura o el ambiente en el que sentirte cómodo para desarrollarla. Así es. Al escribir, como al leer, puede pasar que no sea el momento adecuado para la historia que se está trabajando y, en consecuencia, se deba abandonar.

Os recomiendo que estéis atentos a la siguiente convocatoria.

lunes, 21 de febrero de 2011

Colaboraciones: El amor azul marino, de Manuel Cortés Blanco

Manuel Cortés es uno de esos numerosos escritores-lectores a los que tuve la suerte de conocer a través del foro ¡¡Ábrete, libro!!. Hemos intercambiado pocas palabras y casi todas ellas debidas a nuestros hijos carnales, no a los hijos de papel, que podrían haber constituido el tema principal entre dos personas que se dedican a escribir. Sin embargo, sé que es un hombre especialmente comprometido con sus principios y con los valores que querría inculcar en este mundo.

Como muchos otros autores, tiene otra profesión: es especialista en medicina preventiva. Además, colabora con la ONG Aldeas Infantiles SOS. Pero, sobre todo, es narrador de cuentos, como ha demostrado en sus obras El amor azul marino, con el que obtuvo el Premio Literario Amares 2005, Cartas para un país sin magia y Mi planeta de chocolate, finalista del II Premio Internacional Vivendia de Relato.


Hoy os traigo uno de sus relatos. Me lo proporcionó hace meses, pero ya sabéis lo poco que puedo dedicarme últimamente a mi rincón virtual. No obstante, nunca olvidé la deuda que contraje con él. De manera, que disfrutad con El amor azul marino, cuento que da título a su primer libro:

Dios hizo el mundo en seis días y el séptimo descansó. En un alarde de imaginación creó las estrellas, las nubes, el hombre, la mujer. Apenas había dormido y, sumido en su cansancio, se acostó sin pintar las cosas.

Paradójicamente había creado el Arco iris, y en él cada uno de los colores. Sin embargo, el resto del mundo se debatía en una gama de grises impropia de un trabajo tan extraordinario.

Aquellos colores decidieron avisar al Señor de tal circunstancia, advirtiendo que el universo sería más bonito si pudieran pintarlo a su albedrío. Pero Él dormía plácidamente y no le quisieron despertar.

Fue entonces cuando al Fucsia, el más original entre ellos, se le ocurrió una idea estupenda:

-¿Por qué no lo pintamos nosotros y sorprendemos a Dios cuando se despierte?

Su iniciativa fue acogida con alegría y todos los colores expandieron sus pinceles: sobre los ríos, las estrellas, los amaneceres. Aunque, sin orden alguno, superpusieron sus tonalidades llenando la galaxia de borrones.

Fue entonces cuando el Fucsia, el más original entre ellos, tuvo una nueva ocurrencia:

-Haremos un sorteo de manera que cada uno de nosotros, conforme vaya saliendo, pintará con su gama aquel objeto que elija.

Pese a las reticencias del Gris, rey de reyes en un país de claroscuros, la idea fue aprobada por mayoría. Así que metieron el nombre de cada color en una saca y dio comienzo el sorteo.

El primero en salir fue el Azul:

-¡Qué suerte la mía! -dijo dando saltos de contento-. Porque yo quería pintar el mar…

Y el Azul pintó el mar.

El segundo fue el Verde:

-¡Qué suerte la mía! -repetiría también con regocijo-. Porque yo quería pintar los campos en primavera…

Y el Verde pintó los campos en primavera.

Tercero, el Amarillo:

-¡Qué suerte la mía! Porque yo quería pintar el sol…

Y el Amarillo pintó el sol.

Y así, uno a uno, fueron saliendo todos los colores para acabar rotulando todas las cosas.

¡Qué bonito ha quedado el mundo! Tan lleno de luces, contrastes, tonalidades. Pero Dios seguía durmiendo.

-¿Qué hacemos?, ¿le despertamos?

-No -dijo el Fucsia, el más original entre ellos-. ¿Por qué no hacemos tiempo y pintamos también los sentimientos? Así su sorpresa será mayor cuando se despierte.

El Gris objetó pues, en su opinión, algo tan banal no merece semejante privilegio. Sin embargo, la propuesta fue aprobada por mayoría.

Decidieron entonces utilizar el mismo sistema que el habido para las cosas. De manera que, tras meter el nombre de cada color en una saca, dio comienzo otro sorteo.
Esta vez, el primero en salir fue el Rojo:

-¡Qué suerte la mía! -exclamó satisfecho-. Porque yo quería pintar la pasión…

Y el Rojo pintó la pasión.

El siguiente fue el Verde.

-¡Qué suerte la mía! Porque yo quería pintar la esperanza…

Y el Verde pintó la esperanza.

En tercer lugar salió el Gris que, ante su enfado, decidió colorear la Indiferencia (por eso las personas indiferentes resultan ser tan grises). Y así, uno a uno, fueron asomando los colores hasta llegar al que cerraba lista.

En esta ocasión, y a diferencia de lo ocurrido en el primer sorteo, el Azul salió en último lugar correspondiéndole el único sentimiento que faltaba por escoger. El más esquivo, el más complejo, el menos maleable: el Amor.

Cuando el Creador despertó de su letargo quedó admirado con lo que contemplaba. Su obra era un panel de contrastes que desbordaba belleza por todas sus aristas. Tal vez Él habría teñido el cielo de Naranjas o la amistad con tintes Violetas, pero quiso respetar lo que en su reposo le había regalado el Arco iris. Tan sólo pidió a sus colores que siempre, en cada momento, fueran coherentes con la elección que hubiesen realizado.

Por eso el Amor y el Mar son tan similares; porque ambos fueron elegidos por un color que nunca se olvidó de aquella petición: el Azul. Ambos son fuentes de vida y, pese a ello, capaces de matar. Sucumben al hechizo de la luna, dan coartada a los amantes, inspiran a los poetas que pretenden describirlos, a los pintores que tratamos de plasmarlo.

Y por ello, cuando un mar o un amor nace, constituye para todos un motivo de alegría.


Manuel Cortés Blanco

sábado, 12 de febrero de 2011

La pequeña de la casa ya tiene 3 años

En cuanto nos despertamos el martes, le di a mi mujer su regalo de cumpleaños. Eran unos pendientes. Como casi todos los días, Irene ya estaba levantada. Cuando vio los nuevos pendientes de mamá gritó:

- ¡Quero uno! ¡Es mi cumpeaño!

Era cierto que su cumpleaños, dos días antes, se había celebrado durante todo el fin de semana, a modo de fiesta interminable: el viernes en la guardería con sus compañeros y monitoras, el sábado en casa con la familia y, finalmente, el domingo con sus primos y amiguitos en un McDonald's. Disfrutó tantísimo que terminó agotada de la emoción. Pero quería seguir con la fiesta toda la semana.

- ¡Oooooh! -exclamó con pesar cuando me vio recoger, unos días más tarde, la guirnalda con que había decorado la lámpara del salón-. ¡Quero fiesta!

Y con tanta fiesta, fiesta, fiesta, nos hemos terminado acordando de Pocholo.

Irene ya tiene tres años. Aún recuerdo cuando era muy pequeñita y la cogíamos en nuestros brazos como una ligera muñequita. Pero nuestra vida a su lado ha sido tan intensa que no puedo decir "parece que fue ayer". Tengo la suerte de poderle dedicar mucho tiempo y ver cada día cómo crece y aprende. Ya no es un bebé. Es una señorita.

Vero, su cuidadora en la guardería nos ha contado más de una vez que le encanta pintar y lo hace muy bien, que disfruta haciendo las fichas con los ejercicios y completa las tareas con mucho esmero, que hace muchas migas con las más mayorcitas de su clase, que le encantan los más pequeños y se porta muy bien con los más bajitos y tímidos, los coge de la mano, los pasea. Siempre ayuda y protege a los más débiles. Se parece mucho a su madre.

También le gusta sentirse protagonista. Cuando celebra algo, le encanta encargarse personalmente de repartir los pastelitos y las chucherías a los demás. Y a menudo toma el papel de la señorita para imponer orden, aunque ella sea la primera que se pone de pie cuando no debe.

Además, es analítica, responsable, cuidadosa y hábil. Cualidades no le faltan. Defectos tampoco, claro. Pero es una niña genial. La mejor hija que podíamos tener. Ojalá tenga siempre este carácter tan cariñoso y dócil. Es tan feliz con todo lo que le sucede. Y le fascina viajar. Ha estado en Londres y se lo pasó en grande en la juguetería Hamley's, ha jugado con la nieve en Sierra Nevada, ha visto los ciervos en Cazorla...

No hace mucho estaba en casa con Manoli, la chica que la lleva a la guardería por la mañana y cuidó de ella antes de que empezara este curso. Mientras Manoli limpiaba el cuarto de baño, Irene la ayudaba. Entonces le dijo:

-Ay, estoy cansá. ¡Qué limpito va a quedar! Pero vamos a descansar, ¿no?

-Sí, y así te terminas el desayuno -replicó Manoli muerta de risa.

-¿En la cama grande? -es decir, la cama de matrimonio, que tanto le gusta.

-No, no hace falta. En el sofá.

-Vale. ¿Ponemos los "bujitos"?

-Eso.

Al cabo de un rato, después de descansar un poco, Manoli le instó a seguir con la faena:

-Ya, ¿no?

-La cocina y ya está, ¿eh?

Irene dio dos fregonazos con su fregona de juguete y volvió a decir:

-Estoy cansá.

Y se fue al salon a seguir viendo sus dibujitos y a pintar en su mesita.

martes, 1 de febrero de 2011

Hasta siempre, La Araña

Lamentablemente, a veces es necesario dar malas noticias. Y, en los tiempos que corren, con tantas clausuras de empresas y negocios que se suceden aumentando la lista de pérdidas, una noticia como esta no extraña. Pero, desde luego, sí que duele y pesa en el corazón de los aficionados a la literatura.

Ayer visité por última vez la Librería La Araña, en Sevilla. Era su último día, antes de cerrar definitivamente. En el escaparate, Inés Martín, la dueña, que ha tratado de forma tan especial tanto a los libros que ha vendido como a los lectores que iban a comprarlos, había escrito un mensaje en el que agradecía el haber contado con su público durante los 4 años de vida de la librería. Me sentí aludido, pero no satisfecho; ojalá hubiera tenido ocasión de acudir más veces, de sumarme al motor para evitar este desenlace.


Inés estaba recogiendo las últimas cajas, así que, como era de esperar, al entrar ya no encontré ese rincón tan acogedor que habitualmente nos recibía y que guardaré siempre en la memoria. Cuántos buenos recuerdos me trae. Qué bonitas experiencias con los amigos, tanto allí, durante charlas y presentaciones entre esas cuatro paredes, como en los eventos en que hemos participado juntos, en ferias del libro y encuentros literarios.

Al margen de lo que ha significado para mí la relación con La Araña, como lector y escritor, queda la conclusión objetiva que nos atormenta a todos: qué lástima que se sigan perdiendo sitios como este, en que la literatura (y, de hecho, el arte en general) se mima y se trata con tanta delicadeza.


La Araña ha dejado huella. Y uno piensa que debería tener algún tipo de continuidad. Pero es una etapa que ha pasado, en la vida de Inés y en la vida de los que coincidimos con ella. Hasta siempre, La Araña.

lunes, 24 de enero de 2011

El escritorio: Más fuertes e inteligentes

Antaño eran un ejército de lanzas casi infinito. Ahora, unos enhiestos y otros encorvados, cada vez escasean más. Parecen estar reflexionando toda su vida, mientras se enfrentan a parásitos y dan cobijo a los débiles. En el vecindario, la mayoría tienen la piel cubierta de cicatrices redondas, como si les hubieran cortado una y otra vez los brazos; nosotros no podríamos soportar ninguna de esas heridas en nuestros frágiles cuerpos.

Pero brotan donde menos podemos esperar, en las condiciones más adversas. Sobreviven a toda desgracia y, tarde o temprano, resurgen. Sin duda, son más fuertes e inteligentes que nosotros. Pero la ambición supera nuestra admiración por los árboles.

jueves, 13 de enero de 2011

Reflexiones de un ególatra: La noticia del día

Cuando he escuchado el titular esta mañana, oculto entre las noticias de índole económica, me ha resultado tan sorprendente que, al principio, no conseguía entender su significado. Quizá porque, en este caso, el redactor ha querido conceder al hecho que se denuncia demasiada elegancia:

"Los hosteleros se quejan de que, con la nueva Ley Antitabaco, se ha multiplicado el número de clientes que se marchan sin pagar".


¿Este es el pueblo que queremos ser? ¿Así es como nos comportamos en este país? ¿Lo único que nos impulsa es la picardía y la falta de principios?

lunes, 3 de enero de 2011

Historias para no bajar al sótano

Cuando hoy he entrado en el ascensor del bloque donde vivo, he encontrado este mensaje pegado en el espejo que adorna el panel del fondo.

¿Qué misterio encierra esta advertencia? ¿Qué nos aguarda en el sótano -1?

Inmediatamente, pensé en las películas de terror, en las que los personajes que responden a las señales guiados por su curiosidad terminan... muertos. Así que, de momento, no se me ha ocurrido bajar al sótano -1. Afortunadamente, aparco mi coche en otra planta.

domingo, 2 de enero de 2011

La biblioteca: Recuento de libros leídos en 2010

Además de presentar la relación de libros que he leído durante el año 2010, los he clasificado para dar mi impresión general de los mismos. Para ello utilizo la siguiente notación:

Muy recomendable, imprescindible = *****
Excelente, recomendable = ****
Me ha gustado = ***
Me quedé como estaba = **
No me ha gustado nada = *

ENERO
1 ) La sombra del Faraón, de Santiago Morata ****
2 ) Forastero en cuerpo extraño, de Fermín Moreno *
3 ) Guía del autoestopista galáctico, de Douglas Adams **

FEBRERO
4 ) Los hijos del capitán Grant, de Jules Verne **
5 ) Crónicas marcianas, de Ray Bradbury ****
6 ) La ciudad, de Mario Levrero ****
7 ) Casas y calles de Sevilla, de varios autores ***
8 ) Lazos de sangre, de Pamela Freeman *
9 ) París, de Mario Levrero **

MARZO
10 ) El lugar, de Mario Levrero *****
11 ) Los vientos del olvido, de Ángel Torres Quesada ***
12 ) El niño que quería ser Tintín, de Santiago García-Clairac ***
13 ) El libro de los conejitos suicidas, de Andy Riley ***
14 ) Amphigorey de nuevo, de Edward Gorey ***
15 ) Hijos de Heracles, de Teo Palacios ****

ABRIL
16 ) La amenaza de Andrómeda, de Michael Crichton *****
17 ) Los ojos del lobo, de Care Santos ***
18 ) La proporción aúrea, de Fernando Corbalán ***

MAYO
19 ) En busca de Klingsor, de Jorge Volpi ****
20 ) Indiana Jones y el templo maldito, de James Kahn ***
21 ) ¡Superhéroe por sorpresa, de José María Carrasco ***
22 ) Ayer vendrá, de Luis Rosales ***
23 ) La fiesta de Orfeo, de Javier Márquez ****
24 ) El arca de Noé y el Diluvio Universal, de Claudio Soler y Mónica Quirón **

JUNIO
25 ) Atlántida, de Javier Negrete ***
26 ) El cebo, de José Carlos Somoza ***
27 ) Las congregadas del vaso, de Miguel Ángel León Asuero ***

JULIO
28 ) El elefante de marfil, de Nerea Riesco ***
29 ) Sevilla en la historia y la leyenda, de Rafael Raya ***
30 ) El diablo de los números, de Hans Magnus Enzensberger ***

AGOSTO
31 ) El misterio de la isla de Tökland, de Joan Manuel Gisbert ****
32 ) El tío Petros y la Conjetura de Goldbach, de Apóstolos Doxiadis ****
33 ) El príncipe destronado, de Miguel Delibes ***

SEPTIEMBRE
34 ) No te supe perder, de Salvador Navarro **
35 ) El mapa del tiempo, de Félix J. Palma ****

OCTUBRE
36 ) De profundis, de Oscar Wilde ***
37 ) Fabricantes de sueños 2007, de varios autores **
38 ) Visiones 2008, de varios autores ***
39 ) Y punto (¡¡Ábrete, libro!!), de varios autores ***

NOVIEMBRE
40 ) Por quién doblan las campanas, de Ernest Hemingway ***
41 ) London then and now, de Diane Burstein ****
42 ) La defensa, de Graham Greene ***
43 ) Cazador de libros, de Neyland Bayon **

DICIEMBRE
44 ) El guerrero elfo, de F.P. Pérez de la Parte ***
45 ) Beowulf, anónimo ***
46 ) El jardín de Hipatia, de Olalla García ****
47 ) New York then and now, de Marcia Reiss ****

viernes, 24 de diciembre de 2010

Feliz Navidad


Irene os dice: Pasadlo bien, leed un poquito y disfrutad de la compañía de vuestros seres queridos esta noche sin atragantaros con la comida.

sábado, 27 de noviembre de 2010

El guerrero elfo, de Francisco P. Pérez de la Parte

Ayer, Francisco de Paula fue a Jaén a recoger el Premio CajaGranada de Narrativa Juvenil 2010 que le concedieron no hace mucho. La novela, titulada El guerrero elfo, ya está en las librerías. Estoy convencido de que es una gran historia, pero no quiero emitir aún ningún criterio por dos motivos:

- La he empezado a leer y me gustaría acabarla antes de hablar de ella.

- Voy a presentar al autor y su obra el próximo viernes 10 de diciembre en Casa del Libro de Sevilla (C/Velázquez, 8), a las 19:30.

Estoy seguro de que esa tarde disfrutaremos mucho. Os invito a sumaros a la celebración, conozcáis o no a Fran. Este joven escritor va a brillar mucho en el mundo de los libros, ya lo veréis.

Personalmente, me hace una gran ilusión que haya contado conmigo para presentarle, ya que le he visto nacer como escritor profesional. Tal como recordamos ayer, mientras hablábamos por teléfono, Fran y yo nos conocimos hace unos tres años por una coincidencia relacionada con nuestro trabajo y con amigos comunes. Recuerdo que asistió a la presentación en Sevilla de la reedición de Ladrones de Atlántida y luego nos vimos en sucesivas Ferias del Libro y varios Encuentros de Literatura Fantástica de Dos Hermanas. Su empeño y su esfuerzo le han permitido alcanzar uno de los sueños de cualquier escritor: ganar un premio literario importante. Ahora depende de los lectores, pero su prometedora carrera acaba de empezar.

Como dice otro amigo mío, muchos libros, Fran.

viernes, 22 de octubre de 2010

Reflexiones de un ególatra: Prejuicios con riesgo

En mi última reflexión hablaba de prejuicios y de que todos los tenemos. En efecto, los tienen incluso aquellos que, por su delicado oficio, deberían mantenerse siempre incólumes, objetivos y fríos. Me refiero concretamente a los profesionales sanitarios en general. Por supuesto, abundan quienes se entregan a su carrera con vocación y sentimiento, marcando claramente la línea entre el deber y la proximidad al paciente, para no ser demasiado vulnerables frente al dolor ajeno, pero sin dejar de dar la atención solidaria y afectuosa a quien la necesita. Pero, a menudo, cuando acudimos a la consulta de un médico -al menos, a mí me ha ocurrido con frecuencia-, lo que encontramos al otro lado del escritorio es una persona con prejuicios, muchos más que nosotros mismos.

Nosotros, los pacientes, entramos en su despacho un poco atolondrados. Para empezar, el color blanco de las sábanas de la camilla, de las cortinas, de la bata, de algún que otro mueble, es tan simbólico e intenso que nos abruma, nos intimida y nos prepara psicológicamente para el enfrentamiento con el profesional con la guardia baja. Vamos al médico casi siempre con el respecto ancestral de quien recurre al curandero de la tribu, el único que puede rescatarnos de nuestra enfermedad y liberarnos del mal. Y así es. Suelen tener las herramientas para conseguirlo. Aunque no olvidemos que el propio enfermo tiene mucho que decir.

Pero, mientras que el hecho de visitar al médico y tener confianza ciega en él para el paciente es un acto de fe, hasta el extremo de admitir que nos conoce mejor que nosotros mismos, aunque sea la primera vez que nos ve, para el médico es obvio que siempre exageramos (somos aprensivos), no contamos la realidad tal como es (no sabemos expresar nuestro malestar), no sabemos exactamente lo que nos pasa (no conocemos las reacciones de nuestro organismo) o bien no tenemos experiencia (somos neófitos en la materia, es decir, novatos).

Este exceso de seguridad delata el riesgo que existe de que las cosas se tuerzan y la decisión adoptada para resolver el caso no resulte eficaz. Como todo el mundo, los médicos se equivocan. Desgraciadamente, creo que con demasiada frecuencia. Afortunadamente, no les ocurre lo mismo a los pilotos de avión, a los controladores aéreos, a los gruístas, a los conductores de transportes pesados... aunque no dudéis que también cometen errores mientras desempeñan su trabajo.

En el caso del personal sanitario, puedo explicar esta situación con varios ejemplos personales. Tengo la suerte, hasta el momento, de gozar de una salud aceptable. Nunca he pasado por un quirófano, las enfermedades por las que he pasado no han durado más de lo usual en otras personas, apenas sufro dolores de cabeza o musculares y tampoco me quejo mucho de las molestias que pueda sentir. Tal vez por eso, voy poco al médico y, cuando algo me está haciendo daño de verdad, no dudo en pedir cita o correr a la puerta de Urgencias de mi hospital.

1) Una vez, fui cojeando hasta el médico de Urgencias del Centro de Salud porque me habían pisado esa tarde jugando al fútbol y me dolía terriblemente el dedo gordo del pie derecho. El médico de guardia me instó a quitarme el calzado (no me lo pidió, lo exigió con desgana), le echó un vistazo rápido al pie y me dijo que en dos o tres días se me caería la uña, que era algo normal. Le quitó importancia y me trató como si fuera un quejica. Pero el dolor era tan intenso que no me quedé convencido en absoluto y, de inmediato, me dirigí a las Urgencias del hospital más cercano. Allí notaron enseguida que tenía una infección en el dedo y tuvieron que perforarme la uña para que expulsara el pus. Curado en menos de media hora. Según el primer médico, ¿tenía que esperar a que se me pudriera el dedo para que se me cayera junto con la uña?

2) Hace unos dos años, mi mujer visitaba al pediatra del Centro de Salud que nos correspondía entonces prácticamente todas las semanas, porque nuestra hija pilló un catarro al terminar el verano y no lo soltaba. Además, apenas ganaba peso y cada vez estaba más delgada. Para nosotros era palpable que no estaba evolucionando bien. El pediatra que la atendía le quitaba importancia y lo consideraba dentro de la normalidad, pese a que la niña cada vez estaba más baja en percentiles. Recetaba los remedios comunes para el resfriado y ya está. La niña se debilitaba por semanas y cuando no era un constipado, sufría una gastroenteritis. La última vez que visitamos a ese pediatra, su actitud volvió a ser la misma, aunque la gravedad de la niña ya era notable. Una semana después, en lugar de volver a su consulta, mi mujer corrió a Urgencias del hospital que nos correspondía y justo después de que decidieran ingresarla (más por la angustia de mi mujer que por el estado de la niña), Irene se desmayó. Hubo quien pensó que había fallecido. No tardó en recobrarse del desvanecimiento, pero gracias a esta fatalidad todo el equipo de pediatría le prestó especial atención durante la semana que permaneció en el hospital, hasta que empezó a recuperarse. Aunque solo pasó una semana allí, no se le dio el alta definitiva hasta cuatro meses después. Como consecuencia de este episodio, aparte de que se diagnosticó el verdadero problema de la niña, pudimos cambiar de pediatra. ¿Habríamos perdido a nuestra hija de seguir los consejos del pediatra que la atendía habitualmente?

3) Hace dos años pedí cita a mi médico porque tenía la garganta muy inflamada, no dejaba de toser y me dolía constantemente a pesar de los analgésicos y antiinflamatorios. Además, Irene había pasado una faringitis bacteriana y pensé que posiblemente me había contagiado. Así lo expliqué al doctor, pero este, desde el primer momento, decidió que lo mío era una faringitis crónica vírica. Volvió a insistir en ello tres meses después, cuando volví con los mismos síntomas. Aunque mejoré durante un tiempo, la afección regresó e incluso me puse peor. Mi calidad de vida dejaba mucho que desear. Así que pedí cita a otro médico. Le conté mi historia y se tomó mi caso en serio. Aparte de pedir que me hicieran unas pruebas, optó por recetarme antibióticos. Y me curé al cabo de una semana, permanentemente. Conclusión: Tenía una infección bacteriana en la garganta desde hacía año y medio.

Los prejuicios pueden pagarse caros. Por favor, seamos todos razonables y humildes.

viernes, 15 de octubre de 2010

Reflexiones de un ególatra: Falsos héroes y prejuicios

Hay un tal señor Neira cuyo rostro vemos a menudo en la televisión. Se hizo famoso al entrometerse hace unos años en los conflictos de una pareja, defendiendo a una mujer de la violencia de un hombre, y recibir una paliza por ello. Parece que la celebridad no le ha gustado o no le ha sentado bien. Lo cierto es que, según los medios de comunicación (y matizo esto último, pues la versión de los hechos que tenemos siempre es la relatada por los medios), Neira guarda rasgos en su personalidad que resultan incluso desagradables. No hace mucho volvió a saberse de él por conducir con una tasa de alcohol en sangre no permitida. Hoy nos anuncian que ha ingresado tras sufrir un derrame cerebral, dos días después de la muerte de su agresor. La prensa se ocupa y preocupa en demostrar que es una persona normal y corriente.

Naturalmente, no es un héroe. Es una persona como cualquiera de nosotros, con sus virtudes y sus defectos. Puede que con más defectos que virtudes. Pero lo cierto es que un día tuvo el coraje y la arrogancia de lanzarse sin dudarlo al rescate de alguien que parecía indefensa y maltratada. Lamentablemente, para el señor Neira ha resultado contraproducente manifestarse en público, con reflexiones poco acertadas que le han hecho aparecer como un hombre lleno de prejuicios. Tal vez por eso no se prodiga y limita sus intervenciones ante las cámaras y los micrófonos.

No obstante, prejuicios tenemos todos. Pero seguiré reflexionando y hablando sobre ello otro día. Mientras tanto, espero que nuestro aludido se recupere bien y pronto.

lunes, 11 de octubre de 2010

Colaboraciones: El placer del lector, de Salvador Navarro

Este fin de semana, mientras se celebraba la XXVIII edición de la HispaCON en Burjassot (Valencia), el escritor Salvador Navarro, con el que he coincidido en varias ocasiones los últimos meses, respondió al correo que le había enviado y me envió el texto que reproduzco más abajo para publicarlo en esta sección de mi blog.

Parece increíble que, con lo poco que se prodigan algunas profesiones, dos escritores sevillanos se conocieran en otra ciudad. Eso es lo que nos pasó a Salvador y a mí, que nos encontramos sentados en la misma mesa en la Feria del Libro de Málaga de hace dos años, firmando ejemplares de nuestras obras. A pesar de la relación que ambos guardamos con el foro ¡¡Ábrete, libro!!, fue así como entramos en contacto.


Más recientemente, asistí a la concurrida presentación de su nueva novela en el salón de actos del Club Antares. Coincidencias de la vida, una de sus mejores amigas, que le ayudaba a presentar el libro, titulado No te supe perder, había estudiado Matemáticas por la misma época que yo. De manera que esa famosa regla de que existe un número mínimo de personas conocidas entre dos completos desconocidos volvía a cumplirse.


Por último, nos reencontramos en las III Jornadas Literarias ¡¡Ábrete, libro!!, en Madrid. Allí volvió a confirmar que consideraba No te supe perder como su mejor novela hasta el momento. Ciertamente, no debió de quedar finalista del XIX Premio Internacional de Novela Luis Berenguer por casualidad. Su novela, de cariz realista, narra una historia en torno a varias personas que desarrollan su vida en Sevilla. El sometimiento de unos y la agresividad de otros dibuja nuestro mundo con más proximidad de la que cabría esperar.

Para que le conozcáis un poquito y os animéis a leerle más, os dejo con su reflexión sobre El placer de leer:

De una editorial de un periódico nacional anoté hace algún tiempo que leer te hace más libre, más feliz y más divertido. Una idea se puede expresar de mil maneras, pero me quedé con la frase por rotunda.

Cada cual a su manera interpreta el mundo, su vida, la de los demás, el sentido profundo de las cosas; cada persona tiene sus trucos para ser feliz, da valor a cosas diferentes que el vecino, que el hermano o que el desconocido con quien, tal vez, se cruzará alguna vez por una calle de una ciudad pocas veces visitada.

Cuando nacemos, obligatoriamente nos vemos imbuidos en una atmósfera determinada, una familia que te ofrece el cariño que sabe, que puede o que quiere o no quiere demostrarte, y que te influye en tu actitud ante la vida. Te ingresan en un colegio que tú no eliges para recibir una educación que siempre estará sesgada y, poco a poco, vas despegándote a partir de los amigos, seres con quienes te sientes más cómodo, que tú crees elegir, para ir integrándote en una ciudad que siempre tendrá un perfil determinado, un clima, unos olores, frustraciones y vanidades.

Yo nací en Sevilla, en una familia de clase media, estudié en un colegio de curas y viví una infancia feliz.

Mis hermanos se ríen de ese período en mí, cuando siendo un enano no me separaba del periódico, de los libros de Los Cinco, de los cómics de Mortadelo y Filemón. ¡El repelente niño Vicente…! Más tarde enganchado a Delibes o al Trafalgar de Pérez Galdós, el Cid, la Regenta, el Quijote, el Lazarillo de Tormes, la Celestina, todos libros obligatorios en edad escolar.

Necesariamente el colegio me ofrecía una visión parcial, muy limitada de la realidad. Dios por todos lados, Sevilla como la ciudad más bonita del mundo, un ambiente de derechas y unas verdades indiscutibles.

Pero yo leía.

El húngaro Lajos Zilahy me habló de la amistad, "Por vez primera experimenté cuán dulce es confiar a otro todo cuanto nos oprime el corazón: parece que con ello entra en nosotros una corriente de aire fresco y un rayo de sol"; Julia O’Faolain me comentó que "cuando la religión te falla, la ética funciona bastante bien"; con Dostoievski viajé a los grandes paisajes despoblados de la Gran Rusia para conocer los extremos de la avaricia en el hombre, con Flaubert visité los páramos arbolados al sur de París donde se vivían historias de amor, de engaños inmisericordes, que no podía imaginar; Isabel Allende me insinuaba "que la memoria es frágil y el transcurso de una vida es muy breve y sucede todo tan deprisa que no alcanzamos a ver la relación entre los acontecimientos, no podemos medir la consecuencia de los actos, creemos en la ficción del tiempo, en el presente, el pasado y el futuro, pero puede ser también que todo ocurra simultáneamente...", mientras Carmen Martín Gaite la apoyaba, "¡quién volviera a ese tiempo de instante detenido!". Desde la cama de mi habitación reflexioné sobre teorías dispersas acerca del sexo, "Al sexo va un cuerpo sin cabeza, ni corazón, ni alma. Quien diga lo contrario no sabe qué es el sexo..." afirmaba contundente Antonio Gala, pero Almudena Grandes me confundía, "la maldición es el sexo… no existe otra cosa, nunca ha existido y nunca existirá".

Mi madre murió de cáncer y José Luis Sampedro supo explicarme ese dolor del enfermo terminal; y por esa época de juventud descorazonadora de sangre hirviente me enamoré con tanta fuerza que supe agarrarme a Benedetti, "En el amor no hay posturas ridículas ni cursis ni obscenas. En el no amor todo es ridículo y cursi y obsceno", pero aprendiendo lecciones de Herman Hesse: "El amor y el gozo y esa cosa misteriosa que llamamos 'felicidad' no está aquí ni allá, está solamente dentro de nosotros mismos". Milán Kundera era más ácido conmigo, él me susurraba que "nunca seremos capaces de establecer con seguridad en qué medida nuestras relaciones con los demás son producto de nuestros sentimientos, de nuestro amor, de nuestro desamor, bondad o maldad, y hasta qué punto son el resultado de la relación de fuerzas existentes entre ellos y nosotros". A veces llegué a confundir el amor con la amistad y Marguerite Yourcenar me lanzó un guiño, "la amistad es, ante todo, certidumbre, y eso es lo que la distingue del amor". ¿Quién me explicaba entonces mi infelicidad de universitario perdido en las decisiones por tomar y la vida por vivir? Patricia Highsmith se lo planteaba conmigo, "¿era posible ser feliz lógicamente? ¿Podía hablarse de lógica y felicidad al mismo tiempo?". Siempre estaba Hesse para contestarnos con gallardía, "...el hombre no debe perseguir grandezas o felicidad, heroísmo o una dulce paz, no debe desear otra cosa sino su limpieza de alma, una mente despierta, un bravo corazón y una fiel y comprensible paciencia que lo ayuden a resistir la felicidad junto con el sufrimiento, la conmoción tanto como el silencio" o de nuevo Kundera, "el tiempo humano no da vueltas en redondo sino que sigue una trayectoria recta. Ese es el motivo por el cual el hombre no puede ser feliz, porque la felicidad es el deseo de repetir. Sí, la felicidad es el deseo de repetir".

El placer del arte en sí, lo atrapó tan bien Muñoz Molina, "El arte enseña a mirar: a mirar el arte y a mirar con ojos más atentos el mundo" que no sabría definirlo mejor.

Sándor Marai, en cambio, sacó a relucir mis miedos, "en la vida de toda persona llega un momento en que se queda sola y nadie puede ayudarla".

Con García Márquez hice viajes en que el calor húmedo era asfixiante, pasé un frío tremendo con Thomas Mann en los Alpes suizos, me trasladé miles de años atrás con Waltari para dormir algunas noches en la ciudad de los muertos añorando a Nefer Nefer Nefer, me aventuré por sueños de mundos inexistentes con Rosa Montero. He abrazado una Sudáfrica dura con Coetzee, la Italia medieval con Ítalo Calvino, el Nueva York burgués con Irving, el México adulador y culto con Bolaños. Adoro el Madrid de Millás, la Barcelona de Mendoza, la Sevilla de Cernuda... Amo la Francia de Maupassant, la Alemania de Goethe, la desazonadora Inglaterra de Doris Lessing.

He viajado por todo el mundo y todas las épocas, he conocido hombres moribundos, amores tremendos incapaces de mantenerse en pie, he vivido toda clase de perversiones sexuales, he asesinado y me han aporreado, maltratado, vejado. Me han querido mujeres y hombres, he crecido en Indochina y me he recorrido los Estados Unidos en coche. Sé del dolor de la guerra sin sentido y de la fuerza del poder, me han exasperado vampiros, crápulas y maleantes. Sé lo que es un futuro si la sociedad se envilece, sé como los japoneses padecieron la bomba atómica, he luchado en los dos bandos de la Guerra Civil española. Fui anarquista, fui un facha. He sido heterosexual, homosexual, he tenido sida y ha ayudado a sanar gente.

Sé que la vida es grandiosa, como dice mi querido Auster "es el azar quien gobierna el mundo. Lo aleatorio nos acecha todos los días de nuestra vida".

Sé que hay ciudades más grandes y más hermosas que Sevilla, paisajes impresionantes, gente sabia y buena que nunca llegaré a cruzarme. Soy tolerante porque lo he vivido casi todo y porque estoy dispuesto a seguir sumergiéndome cada rato que pueda al otro lado de los libros, allí donde encuentro las no-respuestas a verdades universales vertidas por gente sabia que un día cogió una pluma y me quiso contar, a mí, lo impresionante que es la existencia humana.


Salvador Navarro

martes, 5 de octubre de 2010

Pasó el V Encuentro de Literatura Fantástica

Tanto tiempo esperándolo y ya quedó como recuerdo del pasado. Pero es cierto que disfrutamos de cada momento.

Aunque el viernes hubo algunas actividades fuera de programa que ya despertaron el interés de muchos, comenzamos el sábado con la inauguración oficial a cargo de Mª Carmen Gómez, la directora de la Biblioteca Pública de Dos Hermanas, y sonriendo a costa del singular discurso de Jerónimo Tristante, que llevaba como título el lema del V Encuentro, La realidad está en crisis.


Después debatimos, especialmente con los escritores (Olalla García, Teo Palacios, y Pepe Carrasco, entre otros; Santiago García-Clairac lo hizo desde el público) y los editores, Teresa Petit de Montena y David González de Berenice, en las mesas redondas Artes y oficios en torno al libro fantástico y ¡El papel ha muerto, vivan los bits!


Tuvimos ocasión de dialogar durante el almuerzo en el Palacio de Alpériz y de reanudar las conversaciones que dejamos interrumpidas un año o dos antes con amigos como Javier Negrete, Alfonso Merelo, Juan Ramón Biedma y Santiago García-Clairac.

También asistimos a la presentación de libros, como 10 billetes para el fin del mundo, y El humo en la botella de J. R. Biedma o la colección Tú decides la aventura, que promocionamos Pepe Carrasco y yo.


El domingo intentamos dilucidar otro cariz de las crisis literarias con la conferencia impartida, de forma muy personal y basada en su propia experiencia, por el escritor Joaquín Londáiz.


Mi papel de presentador me permitió, por proximidad, analizar cada una de las ideas que iba describiendo el conferenciante mientras hablaba y constituir el Decálogo Personal de Joaquín Londáiz para saber ¿Cómo escribir sin entrar en crisis? Dicho decálogo constaría de los siguientes mandamientos:

1) Leer mucho.
2) Tener en mente siempre a los lectores.
3) Mantener activos varios hilos argumentales para desarrollarlos.
4) Elaborar personajes con identidad propia.
5) Preparar un esquema argumental que permita desarrollar tramas paralelas y en cascada.
6) Descubrir con los personajes su propia aventura y su destino.
7) Tener disciplina y método.
8) Participar en la promoción de la obra para motivarse con el contacto con los lectores.
9) Mantener contacto con los lectores y responder a sus mensajes en internet, en las redes sociales y por correo electrónico.
10) Aportar ilusión.

Con la última actividad, la mesa redonda titulada La Atlántida: Mundos en crisis y compuesta por Javier Negrete, Juan Manuel Cortés, Joaquín Londáiz, Alfonso Merelo (como moderador) y yo mismo, conseguimos despertar de nuevo la discusión, ya que mezclaba la literatura con la historia, la ficción con la realidad. Cada uno de los ponentes defendió concienzudamente su hipótesis y el profesor Cortés aportó los matices más solemnes y eruditos con magistral acierto.


"¿Sabían los griegos de lo que hablaban?", se preguntó, aludiendo a las obras clásicas en las que nos intentaban contar la realidad que les rodeaba. Y la respuesta fue: "No completamente". Aunque intentaban ser precisos, no podían indagar sobre el terreno. Para empezar, ni siquiera tenían mapas y su visión de la geografía se basaba en mapas de itinerarios y caminos, sin forma concreta. Conforme se descubría el mundo, se iluminaba con el foco del conocimiento y se perdía la penumbra de la fantasía. El mito de la Atlántida tal vez se originó en el mundo maravilloso del que hablaban los comerciantes, que dejó de serlo cuando más tarde fue explorado por los romanos. El profesor Cortés dictó que "la literatura fantástica es también un modo de conocimiento que utiliza mundos ficticios para comprender mejor el mundo real".

Por último, los miembros del comité organizador clausuramos el V Encuentro, haciendo un resumen de su desarrollo, agradeciendo la participación y la colaboración de toda la concurrencia, y poniendo deberes para la siguiente edición.

Durante el fin de semana, el ambiente fue el adecuado y los moderadores hicieron muy bien su trabajo, manteniendo el equilibrio entre los ponentes y el público. La impresión general parece haber sido muy positiva, aunque ahora habrá que analizar todo, en particular aquellos aspectos que sabemos que se pueden mejorar y lo que se pueda extraer de los cuestionarios que entregaron los asistentes, para comprobar si el balance ha sido tan positivo como pensamos.

Otras referencias:
Dos Hermanas y la excelencia, de Alfonso Merelo
Fotos de Jerónimo Ferrández
Cobertura fotográfica del V Encuentro, en el blog de la Biblioteca Pública de Dos Hermanas
Galería fotográfica del V Encuentro, de Estudio Mira

Nota: Algunas de las fotos que se han utilizado forman parte de la galería de Estudio Mira y todos los derechos sobre las mismas les pertenecen.

viernes, 1 de octubre de 2010

Mañana, no olvides venir a divertirte con la literatura

Ya está aquí la quinta edición. El programa oficial comienza mañana en el Centro Cultural La Almona de Dos Hermanas, pero esta misma tarde ya se han organizado algunas actividades en la Biblioteca Pública.


Este fin de semana nos lo vamos a pasar bien con Jerónimo Tristante, Joaquín Londáiz, Javier Negrete, Olalla García, Pepe Carrasco, Juan Ramón Biedma y muchos más. ¡Te esperamos!

jueves, 30 de septiembre de 2010

Más correrías literarias en Madrid

La presentación del viernes sirvió de aperitivo para las III Jornadas Literarias que organizaba el foro de internet ¡¡Ábrete, libro!! y que se celebraron el sábado 25 y el domingo 26 de septiembre en La Casa Encendida. Ese fin de semana me reencontré con muchos amigos y conocí a otros nuevos. Pude charlar con viejos conocidos del gremio como Jerónimo Tristante, Santiago Morata, Olalla García, Salvador Navarro, Javier Oliva y Manuel Cortés, y con jóvenes promesas como Eva Pérez, una experta cuentista, y Xavier Beltrán, mi joven traductor al catalán.

Mi participación en el evento comenzó con la mesa redonda dedicada a la ciencia ficción. El amigo Sabino, destinado a moderarla, se veía recluido en su casa tras haberse roto la pierna, así que, con pesar porque él, que tanto lo deseaba, no podía estar, pero con el placer de compartir un espacio con todos los presentes, me tocó hacer ese papel a mí. Me vi así rodeado de dos grandes literatos de este país, Rafa Marín y Juanmi Aguilera.

La mirada de Rafa le delata mientras reviso mis notas para comenzar la mesa redonda (foto cedida por Eva Pérez)

Entre cuatro y cinco años hace ya que les conozco y me encanta poder recibirlos cada vez que los veo con un saludo afectuoso. Una vez en la sala, los presenté como "un par de charlatanes". Y lo son, pero de LUJO. Tal como habían prometido, apenas me dejaron hablar. Mi labor de moderación se limitó a iniciar el debate o a reanudarlo formulando nuevas preguntas a lo largo de la hora y media que duró la actividad. Pero se cedían el turno de palabra con suma naturalidad (tan solo en una ocasión se solaparon sus diálogos) y se lo pasaban al valioso público cuando se decidía a intervenir. El éxito de una mesa redonda suele depender del enfoque que le den los ponentes y de la agilidad con que se muevan de un tema a otro; la colaboración de los asistentes y la simpatía de Juanmi y Rafa hicieron posible que todos prestaran la máxima atención en todo momento.

Risas continuas en torno a la ciencia ficción (foto cedida por Eva Pérez)

Otros compromisos me impidieron sumarme a la comida que se organizó a continuación (otra vez será), pero volví a La Casa Encendida el domingo por la mañana para conocer a Javier Reverte y saber qué tenían qué decir él, mi compadre Salva Navarro, el entrañable Santi Morata y la viajera intrépida Sol Alonso acerca de la literatura de viajes. Sorprendentemente, fui incapaz de marcharme antes de que terminaran, tal como tenía previsto, pues despertó en mí, como en el resto del público, un enorme interés. Además, tuve ocasión de conocer a Javier Reverte, después de escuchar sus opiniones, discretas a veces, valientes y firmes en otras ocasiones.

Al margen de estos deleites literarios, por fin conocí el origen de La Casa Encendida, ese edificio tan vasto y pragmático que da cabida a diversas expresiones culturales: hace años fue una casa de empeños.

También pude conversar con los responsables de Editorial Hidra, para reforzar alianzas; así me enteré de que El talismán cósmico ha arrojado cifras positivas todos los meses desde que se lanzó hace dos años y de que se han lanzado ediciones en catalán de 750 ejemplares de mis dos libros en la colección Tú decides la aventura (en el caso de El talismán cósmico, se trata de la segunda edición en este idioma). El futuro de Hidra se muestra muy prometedor y espero que dentro de unos meses volvamos a colaborar, pues ciertamente han orientado muy bien sus líneas de negocio.

Las III Jornadas han obtenido grandes logros y han conseguido llenar la sala. ¡Ahora a por las Cuartas!

Más información en el propio foro.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Presentación de La estela del Dragón en Madrid

El viernes se cumplió de nuevo mi sueño. Durante la presentación de La estela del Dragón, el público llenó la sala de actividades de Casa del Libro en la Gran Vía de Madrid, hasta el punto de que no se cabía. Además, tenía a mi lado a dos amigos: Alberto Pertejo, el editor, y José Carlos Somoza, uno de los escritores más célebres y seguidos de España. Le admiro especialmente por dos motivos: por su novela La caverna de las ideas, uno de mis libros favoritos, y porque, con muchos esfuerzos y desplantes por el camino, ha conseguido lo que pocos logran: convertir la escritura en la profesión que le da de comer.

Alberto Pertejo, de De Librum Tremens, hizo la introducción y destacó mi particular manera de tratar el lenguaje y mi seguridad al vestir la palabra. Le siguió José Carlos Somoza como presentador, que intercaló simpáticas anécdotas personales con sus opiniones sobre la novela, bastante positivas, por cierto. Destacó que "las promesas de futuro ya se están haciendo realidad" en mi carrera literaria y calificó que la novela "es una gozada". Para José Carlos, la novela consigue tratar el fragmento histórico de 1588 que relata con un punto de vista curioso y objetivo, "frente a ambos contendientes [...], que llega a su momento perfecto cuando aparece la flota española en el horizonte y sentimos inquietud". Añadió que "es de agradecer muchísimo que, pese a la grandilocuencia de la época, se mantenga atemperado [...] y sea consciente de que está creando siempre seres humanos al tratar los personajes". Si quieres, puedes escuchar su discurso.

Por mi parte, expuse mis propias impresiones sobre la elaboración de la novela, sobre la fidelidad histórica que había perseguido con ella. Asimismo, intenté responder a las cuestiones que había planteado José Carlos, acerca de esquivar la aparición de su apreciado Shakespeare en el libro (confieso que lo pensé, pero me parecía demasiado enrevesado incluirlo) y de revelar la trama principal de los protagonistas, que se entremezcla con la historia del enfrentamiento entre españoles e ingleses.

El turno de preguntas fue muy intenso y en él el público se dirigió por igual a las tres personas que estábamos en la mesa, a Alberto como editor y a José Carlos y a mí como escritores. A esto siguió una hora de firma de ejemplares que nos emplazó directamente al momento de la cena.

Muchas gracias a todos los que acudisteis, pues sin vuestro apoyo estas cosas no saldrían adelante y me animó mucho estar tan bien rodeado y ser tan bien acogido.

Muchas gracias a Raúl, de Casa del Libro, cuya presencia durante todo el acto me pareció un gesto de máximo respeto con los participantes en la presentación.

Muchas gracias a Alberto, porque consiguió llegar a tiempo con José Carlos pese al tráfico.

Muchas gracias a José Carlos y a su mujer, por la velada tan magnífica que pasamos charlando y por sus palabras de apoyo que tanto me devolvieron el ánimo para seguir adelante en esta difícil carrera.

Y muchas gracias a mis dos chicas, porque estuvieron conmigo en todo momento. Sin ellas, nada tendría sentido.

jueves, 23 de septiembre de 2010

Actividades literarias de fin de semana

Como ya muchos sabéis, mañana presentaré La estela del Dragón en Madrid, concretamente en Casa del Libro (Gran Vía nº 29), a las 19:00, acompañado por mi amigo el célebre escritor José Carlos Somoza. ¡Llevad vuestros ejemplares (prometo dedicatorias) y preparad vuestros comentarios!

Cuando se estaba organizando, procuré que el acto coincidiera con el fin de semana en que se celebran las III Jornadas Literarias ¡¡Ábrete, libro!!, que comienzan el sábado 25 en La Casa Encendida, la misma sede de años anteriores. Por tanto, la presentación de mi novela se convierte en una especie de introducción para abrir el magnífico programa que en esta edición han elaborado los organizadores de dichas Jornadas.


Se trata de una ocasión única para volver a ver a mis amigos del foro ¡¡Ábrete, libro!!, muchos de ellos escritores y todos lectores, así como para recuperar conversaciones. También me reencontraré, entre los invitados, con autores a los que conocí hace unos años y con los que mantengo una férrea amistad más allá de la literatura pero, sobre todo, debido a ella.

Además, a pesar de aquel que yace con una pierna rota que le impide cumplir sus ilusiones, mi participación se ha visto ampliada, pues reemplazaré a Sabino, el moderador de la mesa redonda dedicada a la Ciencia Ficción que se desarrollará entre las 12:00 y las 13:30 del sábado. Rafa Marín y Juanmi Aguilera, que asistirán como ponentes, me han prometido que mi cometido será fácil, porque ¡no me dejarán hablar!

Y en una semana, ¡más en Dos Hermanas!

viernes, 17 de septiembre de 2010

Enhorabuena

No ha sido un verano fácil, literariamente hablando. Pero hay que darle vida de nuevo a este blog poco a poco. ¿Existe una manera mejor de hacerlo que con una celebración?
Un buen amigo me acaba de contar por teléfono que le han concedido un importante premio literario, lo que ha supuesto una gran alegría para mí, tanto por lo que significa para él como por el hecho de que haya querido comunicármelo personalmente y compartir su satisfacción.

Francisco de Paula Pérez de la Parte, que frecuenta este rincón, ha ganado el Premio Literario Jaén 2010 en la categoría de narrativa juvenil con Vida de un elfo. El jurado "ha subrayado la capacidad del autor para crear un mundo imaginario propio, a través de la solidez de los personajes, los valores del protagonista, la cuidada ambientación y el desarrollo de tramas que permitan al lector disfrutar de una nueva fantasía ética". Resulta interesante señalar que entre los miembros del jurado estaban Teresa Petit, de Editorial Montena (en dos semanas estará en el V Encuentro de Literatura Fantástica de Dos Hermanas) y el célebre escritor y amigo Javier Negrete. Tenéis la noticia completa en Europapress.

Seguramente no es casualidad que un día Fran y yo nos conociéramos en los Encuentros de Literatura Fantástica de Dos Hermanas. Desde entonces, nuestros caminos se hayan cruzado una y otra vez. Le deseo mi más sincera ¡enhorabuena! Sin duda se trata de un magnífico paso adelante en esta carrera por etapas.

jueves, 16 de septiembre de 2010

Taller de Palabras

Este proyecto nació como una sólida propuesta de ocio cultural y formación vocacional para jóvenes y adultos en donde desarrollar la creatividad y compartir la pasión por la literatura. Conociendo el vacío existente en la formación en estas materias y sobre todo en la oferta de ocio cultural de Sevilla, sus fundadores se plantearon esta iniciativa hace ya un año. Desde siempre han hecho especial hincapié en los niños, en su comprensión lectora y en el fomento del amor por los libros desde pequeños, realizando cursos y actividades específicas para ellos, para complementar esas materias de expresión y comprensión lectora que como tales, no son asignaturas escolares específicas.

Los cursos están dirigidos a personas de todas las edades: niños, jóvenes y adultos. No hay una edad para empezar a escribir o para compartir el amor por la literatura. Los métodos de enseñanza de Taller de palabras se basan, por encima de todo, en generar y potenciar la necesidad comunicativa de las personas. A veces será una necesidad puramente práctica, a veces será expresiva o creativa. Los alumnos de Taller de palabras no son sólo niños con problemas de expresión, o jóvenes y adultos con aficiones literarias: son, sencillamente, personas que tienen cosas que contar, y nosotros los ayudamos a hacerlo mejor.

Al margen de los cursos, desarrollan actividades de ocio literario y animación sociocultural para niños, jóvenes y adultos: talleres cortos, teatro, cuentacuentos, gymkhanas, rol, etc. Dichas actividades se desarrollan en colaboración con organismos e instituciones. En su aula cuentan con una pequeña biblioteca de préstamo de libros de ficción para niños y adultos, además de una amplísima bibliografía en materia de escritura creativa y narrativa disponible para consulta. Además, como parte de su compromiso permanente con la cultura, colaboran de manera continua con proyectos sin ánimo de lucro cuya filosofía comparten, como BookCrossing y el National Novel Writing Month.

La marca de distinción de Taller de palabras es algo tan sencillo como el ambiente que se crea. Los alumnos se sienten apoyados y acompañados en su aventura literaria. En Taller de palabras encuentran a gente con quien compartir sus aficiones y se crean grupos muy interesantes. Todos disfrutan muchísimo con los cursos que ofrecen, y es lo que más agradecen.

Os invito a conocerles mejor (os aseguro que merece la pena) en su web: Taller de palabras.

miércoles, 18 de agosto de 2010

Guía de lectura de verano 2010


Como ya es habitual, el Seminario de Bibliotecas Escolares de Zaragoza, que reúne a los centros IES Andalán, IES Élaios, IES José Manuel Blecua, IES Medina Albaida e IES Miguel Catalán, ha editado una guía de lectura para este verano.

Entre otros títulos que recomienda dicha guía están El tercer Reich de Roberto Bolaño, Esclava de nadie de Agustín Sánchez Vidal, La Universal de Toti Martínez de Lezea, El amor y la muerte de José Luis Corral, La estrategia del agua de Lorenzo Silva, Compañeras de viaje de Soledad Puértolas, Viejas historias y cuentos completos de Miguel Delibes y... ¡La estela del Dragón!

Cuando me lo contó el escritor y librero Javier Lahoz, amigo entregado a la causa a quien conocí cuando comenzaba mis andaduras literarias, me cogió completamente por sorpresa. Al parecer, la novela está teniendo muy buena acogida en Zaragoza. Sin duda, diga lo que diga, parte de este éxito se lo debo a él, que recomienda el libro a pesar de no haber terminado de leerlo. Gracias, Javier, por tu confianza y por las noticias.

miércoles, 11 de agosto de 2010

Aventuras en México D.F.: Los taxis, una anécdota de Ángel Rider

Jueves, 27 de mayo de 2010

En esta ciudad hay dos tipos de taxis. Los que parecen taxis, con su línea bicolor dorada y roja en toda la carrocería, su licencia en el cristal y su mojón puesto encima del techo, y los que no pone absolutamente nada, ni hay apariencia física de que eso sea más que un buen coche. Contra todo pronóstico, los seguros son los segundos, los primeros son los que huelen a amenaza de secuestro con un poco de mala suerte. Evito montarme en estos, claro, siempre desde el hotel me ponen uno de los buenos[...]

Después justo de mi curso, me habían preparado una sorpresa especial: dar una charla sobre un temario del que tengo un 10% de idea. [...] Charla. Dos horas y veintitrés minutos más tarde salgo victorioso de la misma habiendo contestado a toda clase de preguntas extrañas y a bocajarro de estos cuates. Ya sé por qué mi jefe me contrató y me adora. Tengo casi la misma capacidad que él de esquivar disparos, parezco Neo en Matrix. He dicho contestado, no contestado bien.

Aturdido, a punto de salir, me afronta un señor que no conozco de nada, ni se presenta, y que físicamente puede ser el padre de Pocholo y se pone a contarme un tema de trabajo que me importa tres pepinos. Quiero largarme cuanto antes. Enciendo el móvil. Solo un mensaje. Para paliar este desaire, me pongo los auriculares (necesitaba un chute de droga de la buena): Stereophonics – Maybe tomorrow, y salgo a recepción a que me pidan un taxi.

A mitad de canción mi atención se distrae: acaba de entrar por la puerta un chico de aproximadamente mi edad, enchaquetado, aunque con look ebrio y... ostias, ¡pantalones rasgados! Me quito un auricular; le pide a los chicos de recepción que si puede hacer una llamada, que le han robado, que han intentado secuestrarlo, que no tiene la mitad de sus cosas, que no se acuerda de mucho más…

Me quito el otro auricular.

El chico tiene un golpe en la sien opuesta a mi visión inicial, y realmente está muy confundido. No sé si le han dado una especie de droga que lo atonte o viene así de fábrica. Él sigue contando una historia, ellos lo dejan llamar, yo sigo flipando, todo sucede como de mentira. Pasan cuatro minutos de este palo.

El chico de recepción me hace un gesto, acaba de llegar mi taxi. Tiene una línea bicolor dorada y roja en la carrocería. Genial.

martes, 10 de agosto de 2010

Qué fácil

¿Qué es 299 con respecto a 2100? ¿Sabes la respuesta? ¿Cuánto has tardado en obtenerla? No te preocupes si has empleado demasiado tiempo, aunque, una vez que la tengas, la solución te parezca trivial.

A veces, debido a su magnitud o a características particulares de los números, estos aparentan mayor complejidad de la que tienen, pero, como es el caso expuesto, en realidad pueden relacionarse de la manera más sencilla. Es la "magia" de la aritmética y de las formas con que la representamos. Una potencia como 99 ó 100 enseguida nos hace pensar en números que no caben en nuestra cabeza si desarrollamos los productos. Pero, salvo por la capacidad de comprenderlos, se pueden tratar como los números más pequeños.

domingo, 4 de julio de 2010

Colaboración con la revista Ágora digital

El número 20 de la revista digital Ágora, papeles de arte gramático ya está en la red. En él se incluye un reportaje que preparé sobre la literatura fantástica con el título La fantasía en el panorama literario actual. Si deseáis leerlo, lo podéis encontrar en la página 52. La revista se puede descargar mediante MediaFree o bien desde Issu.

jueves, 1 de julio de 2010

Programa del V Encuentro de Literatura Fantástica


Por fin presentamos el programa del V Encuentro de Literatura Fantástica de Dos Hermanas (Sevilla). Atentos a los invitados de esta edición.

Sábado, 2 de octubre

9.00. Recepción de participantes y entrega de credenciales.

10.00. Inauguración del V Encuentro Literatura Fantástica a cargo de la Delegada de Juventud y Cultura Dª Rosario Sánchez.

10.15. Conferencia La realidad está en crisis de Jerónimo Tristante. Le presenta Ernesto Fernández.

11.30. Pausa para el café.

12.00. Mesa redonda. Artes y oficios en torno al libro fantástico. Modera y coordina: Teo Palacios. Participan: Mamen de Zulueta (agente literario), David González (editor de Almuzara) y Olalla García (traductora).

13.30. Presentación del libro 10 billetes para el fin de mundo. Grupo AJEC. Presentan Manuel Mije y Ernesto Fernández.

14.00. Encuentro entre los participantes y almuerzo de bienvenida en el Palacio de Alpériz.

16.30. Mesa Redonda. ¡El papel ha muerto, vivan los bits!. Modera y coordina: Pepe Carrasco. Participan: Teresa Petit (editora de Montena), Jesús García (Responsable de Marketing Online) y Javier Márquez (escritor y periodista).

18.00. Presentación del libro El humo en la botella de Juan Ramón Biedma.

18.30. Presentación de la colección Tú decides tu aventura, con Pepe Carrasco y José Ángel Muriel.

19.00. Conferencia Teórico práctica sobre el papel del narrador en la literatura fantástica Como la aguja y el hilo: Fantasía y oralidad. Diego Magdaleno y Filiberto Chamorro del grupo Recuento de Narración Oral.


Domingo, 3 de octubre

11.00. Conferencia. Cómo escribir sin entrar en crisis, a cargo de Joaquín Londáiz.

12.00. Mesa redonda. La Atlántida: Mundos en crisis. Modera y coordina Alfonso Merelo. Participan: José Ángel Muriel, Javier Negrete, Joaquín Londáiz y Juan Manuel Cortés Copete (profesor titular de Historia Antigua y Vicerrector de ordenación académica de la universidad Pablo de Olavide)

14.00. Entrega de premios a los ganadores del III Concurso de lemas y clausura del V Encuentro de Literatura fantástica La realidad está en crisis.


Más en la web del encuentro

lunes, 28 de junio de 2010

Cryptonomikon 3 ya a la venta

Ya está a la venta el libro que reúne los relatos ganadores y finalistas del III Premio Cryptshow Festival de Relato de Terror, Fantasía y Ciencia Ficción.



Más información también en Facebook.

martes, 8 de junio de 2010

Entrevista y reseña de La estela del Dragón

La estela del Dragón sigue viento en popa y a toda vela. Muchos me preguntáis cómo está funcionando el libro en el mercado. La verdad es que no lo sé aún, pero es cierto que todas las críticas y las observaciones de los lectores que me han llegado hasta ahora son positivas.

Esto por sí solo es muy alentador, tanto como la fortuna de ser agraciado con reconocimientos en concursos. Son pequeños pasos para el escritor y, al mismo tiempo, un cúmulo de ánimo para impulsar la maquinaria cerebral y artística. Como muchos sabréis, resulta difícil compaginar actividades diferentes, aficiones, responsabilidades profesionales, etc. Pero el fruto del esfuerzo y el empeño que se pone en sacar adelante un relato o una novela siempre es satisfactorio.


Los amigos de La Biblioteca Imaginaria publicaron ayer una reseña de La estela del Dragón y la entrevista que me hicieron hace unos días. Os invito a leerlas.

domingo, 6 de junio de 2010

El escritorio: Augurios de un nuevo imperio premiado

CRYPTSHOW FESTIVAL se consolida como el festival más importante en la difusión y el apoyo de los géneros fantástico y de terror en el área del cinturón Barcelonés llegando a tener repercusión nacional e internacional. Entre el 14 y el 18 de julio celebra su cuarta edición en Sant Adrià de Besòs. El cine independiente, los cortometrajes, la pintura, la ilustración, la literatura, el cómic, la música y todo lo que rodea el género fantástico y de terror tienen un punto de encuentro en este evento.


Como en años anteriores, la organización del festival ha organizado un concurso de relatos. Los ganadores en las tres categorías del III Premio Cryptshow Festival de Relato de Terror, Fantasía y Ciencia Ficción han sido:

BASARDA, de Alicia Gili. III Premio Cryptshow Festival de relato de terror.

AVATARES DEL CUERPO Y DE LA MENTE, de Gustavo Eduardo Green. III Premio Cryptshow Festival de relato fantástico.

AUGURIOS DE UN NUEVO IMPERIO, de José Ángel Muriel. III Premio Cryptshow Festival de relato de ciencia ficción.

Los relatos ganadores, junto con los finalistas, formarán parte del libro recopilatorio Cryptonomikon 3, que se podrá comprar a traves de internet a partir de la celebración del Festival.

Como podéis imaginar, he sentido una gran satisfacción al ver mi nombre entre los galardonados y me alegra comprobar que mis narraciones dentro de un género tan exigente como la ciencia ficción logran agradar y complacer a los lectores.

martes, 1 de junio de 2010

Fallo del III Concurso de Lemas de Dos Hermanas, Sevilla


En la Biblioteca Pública Pedro Laín Entralgo de Dos Hermanas se reúnen los miembros del jurado del III Concurso de Lemas para el V Encuentro de Literatura Fantástica que se celebrará en la localidad de Dos Hermanas los próximos días 2 y 3 de Octubre de 2010. El jurado está constituido por los miembros del comité organizador del encuentro.

Tras la lectura de los 73 lemas presentados a concurso, los miembros del jurado deciden conceder el primer premio al lema La realidad está en crisis cuyo autor resultó ser Daniel Sánchez Bonet.

Los miembros del jurado deciden hacer constar en acta los dos lemas que, además del ganador, han resultado finalistas: Encuentros en la V fase, de Silvia Rodríguez e Inés María Guzmán, y Más allá de las letras, de Susana Carballo.

Dos Hermanas, a 26 de Mayo de 2010

Más información aquí.

martes, 25 de mayo de 2010

Entrevista en Radio Aljarafe

Mamen de Zulueta, agente literaria sevillana que trabaja en la Fundación José Manuel Lara y que participa en Radio Aljarafe, añadiendo una nota literaria y cultural todos los martes hacia las 13:30, se acordó de mí hace poco y me invitó al programa para entrevistarme el 25 de mayo. El tiempo pasó fugaz pero resultó una conversación muy completa y entretenida que podéis escuchar aquí.

Irene ya no es un bebé

Ya no es un bebé. Es algo que nos repetimos constantemente. Dentro de unos meses comenzará a hablar casi como los adultos (de hecho, ya construye frases perfectamente y pilla el hilo de todas las conversaciones al vuelo), comerá completamente sola, se liberará de los pañales y dará el salto a la autonomía como personita.

Una de las decisiones más acertadas que hemos tomado en nuestra vida fue forzar el regreso desde Valladolid. Es cierto que las circunstancias laborales no eran tan propicias como se había esperado, pero, además, estaba en juego la salud de nuestra hija, como luego se ha demostrado, y hasta llegar a Sevilla no nos dimos cuenta de la importancia de volver a casa. Desde que vive en Sevilla es otra. Solo ha pasado un resfriado y una pequeña gastroenteritis, ha engordado y ha crecido mucho. En Valladolid, raro era el mes que no íbamos a urgencias y rara la semana que no visitábamos la consulta del pediatra. Probablemente lo pasemos regular a partir de septiembre, cuando se incorpore de nuevo a la guardería y pille todos los virus y microbios del mundo. Pero, como diría un físico, eso estará dentro de los parámetros normales.

A veces pensamos que Irene está un poco consentida, quizá por lo mal que lo pasó durante su primer año y medio de vida y por el exceso de protección que tuvimos que darle. Pero la verdad es que es obediente y nos cuesta limitar su espíritu inquieto, que todo lo quiere tocar, saber, averiguar, mirar, analizar. Tiene gran facilidad para la imitación y ha empezado a poner voz a sus muñecos. Si en Navidad, cuando un vecino de mi madre se despedía de nosotros, Irene le saludaba convencida con un ¡Adiós, Baltasar!, porque ese señor es negro, ahora es capaz de abstraerse de la realidad y responder como si hablara por boca de su muñeca favorita, con la que duerme desde que tenía dos o tres meses.

-¿Tienes sed, Elefantita? -le preguntó Mª Carmen.

-Yo no -contestó Irene con voz en falsete, simulando que hablaba la propia Elefantita, en su regazo-, pero Irene sí.

Supongo que todos los padres tienen la oportunidad de descubrir las aptitudes de sus hijos mientras los ven crecer y todos los hijos destacan en algo, aunque para cada padre el mejor del mundo será su propio hijo. Sin duda, lo que más sigo admirando de mi hija es su alegría, su capacidad de disfrutar absolutamente con todo. Todo le gusta, todo le sorprende, todo provoca su sonrisa y su asombro. Le encanta bailar, cantar, gritar, reír. Ojalá conserve siempre esa personalidad, fuerte y firme, que le permite enfrentarse a lo que venga con tanto entusiasmo.

Ya han pasado las ferias a las que habíamos programado ir. Y cómo ha gozado Irene con su traje de gitana, como ella dice. Cómo movía los volantes y los brazos, giraba sobre el eje de su cuerpecillo y danzaba al son de las sevillanas. Curiosamente, el traje, que antes se ponía a diario en casa, a la espera de que llegara la fecha de salir con él a la calle, ha quedado olvidado definitivamente en el armario. Eso confirma la emoción con que lo vive todo (pulsad en la foto para ampliarla y observad cómo le brillan los ojos y con qué descaro se ofrece a la cámara) y que tiene conciencia de que cada cosa ocupa su tiempo y su lugar, no más.

Aprovecha tus virtudes, hija mía, que muchas pareces tener, y también tus defectos. Sigue siendo tan positiva, aunque la vida se vaya haciendo un poquito más difícil conforme recaiga sobre ti la responsabilidad de crecer. Si algún día lees esto, comprenderás mejor por qué te envío ahora un beso muy grande hacia el futuro, aunque te tengo muy cerca y puedo dártelo en la carita ahora mismo.

domingo, 23 de mayo de 2010

Colaboraciones: 24 horas con ella, de Mª José Sobrino Simal

A Mª José la conocí hace muy poco con el sobrenombre de Marse. Un buen día, leyó mi idea acerca de esta sección de colaboraciones de otros autores y decidió escribirme. Se considera a sí misma, de momento, una escritora amateur. Sin embargo, ha publicado cuatro libros de relatos bajo los títulos El país de los sueños, La fiesta de Barbie, En el sabor de la noche y El caballero y la cenicienta. Y, además, es tan valiente que también se atreve con la poesía y la pintura.

Se da la circunstancia de que conozco su tierra bastante bien, aunque no he vivido nunca por allí. Luego he descubierto que esta castellano-manchega y yo también hemos coincidido en el libro solidario que se preparó por las víctimas del terremoto de Haití. De manera que seguramente no ha sido por casualidad que nuestros caminos hayan vuelto a cruzarse. Mª José me propuso que eligiera uno entre varios de sus textos. Sus versos y su prosa resultan muy naturales, muy espontáneos y frescos. Finalmente me decanté por el que presento aquí, publicado originalmente en su blog El rincón de Marse: 24 horas con ella. Y lo he ilustrado con la misma imagen de las Tablas de Daimiel que ella escogió en su día.


Hacia tiempo que no hablaba con ella, la encontré en la esquina del museo, y con aire desolado me dijo que no sabia nada de mi, entonces con aliento cansado le dije:

-Muy bien, daremos un paseo por el parque, pasemos el día juntas...

-Pero si tú nunca tienes tiempo para mi -me dijo con aire desolado.

-Si, lo se, te tengo bastante abandonada.

-Cuando dices que vamos a hacer algo juntas, me hago ilusiones pero luego desapareces como un barco de vapor en alta mar.

-Llevas razón, pero te doy mi palabra, daremos un largo paseo, hasta que termine el día si es necesario.

Y así fue, recorrimos el parque, nos leímos juntas un pequeño libro de bolsillo que llevaba hace meses, si, he dicho bien, hace meses en mi bolso, lo adquirí en un mercadillo medieval, pero el pobre iba de un lado a otro del bolso esperando a ser leído. Esa tarde lo compartí con ella.

Después del libro estuvimos escuchando aquella recopilación completa que me bajé al móvil también hace meses, y... que nunca llegué a escuchar. Después nos fuimos a hacer la ruta de los museos, que también hacia meses que no los visitaba, después de todo eso nos fuimos al café "Carpe Diem", lugar donde siempre me había reunido con mis amigas y que por alguna razón del destino allí se encontraban todas, en la mesa ante el gran ventanal desde donde se podía divisar la gran vía; después nos fuimos simplemente... a pasear, mientras hablábamos de todo, recordamos de todo, y como siempre, no siempre estábamos de acuerdo en todo, discrepamos, discutimos, era tan igual a mí y a la vez tan diferente.., hablamos del pasado, del presente y de lo que esperábamos del futuro, recorrimos calles, paseos, ramblas, creo que en la vida había caminado tanto como aquel día. Sin darme cuenta cayó la noche, sin darme cuenta los zapatos me jugaban ya la mala pasada de hacer que no pudiese ni caminar, sin darme cuenta me di cuenta, me di cuenta que había pasado todo un día en compañía de la persona que mas habia alejado de mi, esa persona...era yo.


Mª José Sobrino Simal

sábado, 15 de mayo de 2010

El escritorio: Avances sociocientíficos

Ayer tuve que acercarme a la estafeta de correos a recoger un paquete. Como ya es habitual últimamente, había cola. Así que cogí número en la máquina expendedora y esperé mi turno pacientemente. Justo delante de mí tres personas estaban hablando. Habían llegado juntos y cuchicheaban sobre asuntos que no eran de mi incumbencia. Pero no pude evitar escuchar parte de su conversación.

-Sí, le dio un ataque y está fatal –dijo una de las dos señoras-. Le subió el ácido nefrítico.

“Claro que sí”, pensé. “Y la bilirrubina”.

Menudo descubrimiento científico. Un nuevo elemento químico se suma a la tabla: el nefrorio.

domingo, 9 de mayo de 2010

Jornada entre libros

La Feria del Libro de Sevilla es una cita a la que no se puede faltar. Además, pasear entre libros por esta ciudad es una de las mayores maravillas del año. Ayer pasé un rato en la caseta de Librería La Araña, con Inés y Elena, y tuve ocasión de reencontrarme con viejos amigos y charlar con algún que otro aficionado de la novela histórica.

Foto cedida por Eduardo Blanco

Por la tarde, tal como teníamos previsto, nos unimos a la ruta literaria organizada por Nerea Riesco con Casa del Libro en la que recorrimos los alrededores de la Plaza Nueva reconociendo algunos lugares que aparecen en su novela El elefante de marfil. De la mano de la autora descubrimos secretos que nos tiene reservados Sevilla si estamos atentos y situamos la acción de varias escenas del libro, como la destrucción de la Cárcel Real en la calle Sierpes a causa del terremoto o la ubicación de la imprenta de la familia protagonista en la calle Génova (actual Avenida de la Constitución), momento que se recoge en la fotografía.


Resultó así una jornada reconfortante y muy cultural. Os invito a disfrutar de estos días y conocer a los escritores de las obras que estáis leyendo. Estoy seguro de que os resultará gratificante.

martes, 4 de mayo de 2010

Feria del Libro de Sevilla 2010


Del 6 al 16 de mayo, vuelve la Feria del Libro de Sevilla a la Plaza Nueva y a la Plaza de San Francisco con una intensa programación. Esta edición homenajea al poeta Miguel Hernández en el centenario de su nacimiento.

Conferencias, tertulias, presentaciones de novedades, cuentacuentos, conciertos... Y, naturalmente, firmas de libros. Yo mismo estaré dedicando ejemplares de La estela del Dragón el sábado 8 de mayo, desde las 11:30, en la caseta 61, de la mano de Inés Martín un año más, con Librería La Araña. Podéis situar la caseta en este plano.